Hasta ahora en TEFIPRO utilizábamos de manera habitual gráficos circulares como los de tipo «tarta», para mostrar cierto tipo de datos. Sin embargo, hemos descubierto la gran cantidad de errores y malos entendidos que genera este tipo de visualizaciones.

Es por ello que vamos a escribir un primer artículo con el objetivo de “Vaciar la taza”, para en uno próximo explicar cómo mostrar la misma información de una manera más efectiva.

Como decíamos, hasta ahora en TEFIPRO utilizábamos de manera habitual este tipo de gráficos. Nos parecían útiles a la hora de indicar como diferentes partes forman un conjunto. Sin embargo, a raíz del artículo de Stephen Few – “Save the pies for dessert” [i] hemos entendido que no es la mejor manera de mostrar información:

Comencemos diciendo que los gráficos de tarta sólo son sencillos de juzgar cuando las porciones son próximas a 0%, 25%, 50%, 75% y 100% (0⁰, 90⁰, 180⁰, 270⁰, 360⁰). Por ejemplo:

Es sencillo de reconocer que las ventas de “C” son del 25%. Sin embargo en la siguiente visualización ya no es tan sencillo:

Ningún valor ha cambiado y sin embargo nuestra habilidad para reconocer el 25% no es la misma.

El ser humano y su sentido de la vista no están desarrollados para calcular bien ángulos o superficies circulares.

Naomi Robbins [ii] indica:
“Enjuiciamos los ángulos cuando interpretamos un gráfico de tarta, pero no juzgamos bien los ángulos. Estos juicios son desviados; subestimamos los ángulos agudos, y sobre estimamos los obtusos. También los ángulos con el bisector en la horizontal nos parecen mayores que cuando la bisectriz coincide con la vertical.»

A partir de aquí podemos utilizar las diferentes posibilidades del software para completar esa información que nuestro ojo no es capaz de captar, por ejemplo incluir el %.

E incluso el nombre de la categoría:

Pero con ello lo único que estamos haciendo es utilizar un tipo de gráfico simpático y suplir sus deficiencias con información adicional.

Un gráfico es útil cuando hace visible la relación entre los datos.

Otro ejemplo de la falta de habilidad del ojo humano con las figuras circulares podemos verlo en la siguiente visualización.

¿Cuál es la relación entre área del círculo pequeño (2001)  y el área del grande (2002)?

La mayoría de la gente da valores entre 6 y 50 (si quieres quieres conocer la respuesta correcta está al final del artículo).

Esta dificultad discernir áreas circulares 2D se ve potenciada en gráficos como el siguiente:

Una vez que ya hemos confirmado que el ojo humano no es especialmente habilidoso para calcular ángulos y superficies circulares, es cuando llegan los gráficos circulares en 3D:

Los datos de origen son los mismos, la porción naranja es un 40% mientras que la gris es un 25%, sin embargo esta perspectiva nos las iguala. De manera que si nos muestran gráficos como estos quizás deberíamos sospechar de los fines de la otra parte o de su valía técnica.

Si nuestro objetivo es transmitir información útil orientada a mejorar, probablemente el camino no pase por los gráficos circulares. En una próxima entrega indicaremos un mejor camino.

(La relación entre las áreas circulares del gráfico de burbujas es 16.)

[i] https://www.perceptualedge.com/articles/visual_business_intelligence/save_the_pies_for_dessert.pdf

[ii] Naomi Robbins, Creating More EffectiveGraphs, Wiley, 2005, p. 49